Como si de una moneda al aire se tratara, así es la decisión de subir a Alaska.
Casi 4000km hasta Anchorage y una previsión del tiempo de lo mas desalentadora.
Temprano en la mañana, justamente en el desayuno, hablo con recepción del hotel y me dan las malas noticias sobre el tiempo hacia el norte: está lloviendo.
La señora consulta internet y por delante 3 días de lluvias, el resto está poco claro.
El problema no es la lluvia, sino que con tanto frío se hace hielo en la carretera y luego los accidentes.
Me voy dando un paseo hasta el taller de Brooks. Allí está trabajando desde muy temprano y me dice lo mismo, que ha consultado internet y la cosa pinta muy fea.
La noticia de mi llegada a esa ciudad se extiende entre los amigos de Brooks, así que poco a poco van llegando y me encuentro rodeado de buena gente hablando de viajes en moto. Todos con la curiosidad sobre Jimena y los países que he cruzado.
Cuando hablamos de seguir hacia Alaska, arrugan la cara y dicen "no sabes lo que estas diciendo... es demasiado tarde". Ni uno solo me dio esperanzas de poder llegar a mi meta principal del viaje. Ellos están muy al tanto de las rutas y tienen muchísima más experiencia que yo por esas tierras... y sigo el dicho "donde fueres, haz lo que vieres.."
Definitivamente... NO VIAJARE A ALASKA
Triste decisión.... pero creo que lo mas coherente.
Ahora se terminaron las prisas... tengo que reorganizarmen. Necesito estar un rato solo para ver hacia donde dirijo el viaje....
