martes, 7 de octubre de 2014

Y nos vamos... hacia Texas

Tras el estado de Nevada entramos en Arizona. 
Un cielo amenazante pero por el momento ni una sola gota.
La carretera en buenas condiciones y unas rectas interminables.
Poco tráfico y casi no hay motos. Las hemos dejado en la ruta 66.

Los restaurantes de carretera son un espectáculo. Con sus tiendas de recuerdos y souvenirs, las hamburguesas cada vez más grandes y cerveza, mucha cerveza...

Contrasta mucho los colores de las gasolinera y restaurantes con lo árido del paisaje. Somo como las notas de alegría en una ruta interminable....
Sigo pensando que está siendo la ruta más pesada y aburrida del viaje.



Los americanos son únicos... y si no que se lo digan a Jimenta con todo lo que pudo ver por allí... jeje

Patriotas como ningún otro país, las banderas ondean por todas partes bajo un cielo que está a punto de romper a llover... Mejor nos vamos rápido a ver cuántos kilómetros podemos hacer antes de que llueva.

Me aburro tanto que cualquier cosa sirve para distraerme. Por ejemplo este cohéte con estos dos entrañables pasajeros... jeje
Me pregunto que pintará allí, en medio de la nada...



En los laterales de la carretera la arena amenaza con meterse a la vía y volverse peligrosa, pero por suerte el viento es nulo.
Revisé la previsión del tiempo en una gasolinera que sorprendentemente tenía conexión a internet grátis. Dicha previsión dice que no lloverá, pero el cielo amenaza y no me fio.
Gas e intentamos recorrer los máximos kilómetros...

El paisaje cada vez más árido. Sin duda aparecerán pronto las dunas como en Atacama!!!  y eso si que es precioso.

Por fin.. la tierra prometida. Hoy no rodaré más. Tucson nos espera y hoy le daré una revisión a la moto que se lo tiene más que merecido.
Por suerte ni una sola gota sobre nosotros. Hemos sido afortunados porque el horizonte viene muy feo....

Mañana será una etapa interesante, cruzaremos el estado de Nuevo México y quiero llegar a la frontera con México. Me acompañas Charlie?